Es uno de los saberes más antiguos si tenemos en cuenta que lo primero que hizo el hombre cuando se cuando tuvo consciencia, fue mirar al cielo y empezar a hacerse preguntas. La astrología estudia la energía de los astros y cómo esa energía, dependiendo del lugar en que se encuentre en el cielo, va a afectar y de qué manera a todos; las personas, los animales, las plantas y a la Tierra en su totalidad. La carta astral de una persona es una «foto» al cielo en el momento preciso de su nacimiento y esa imagen no solo nos va a dar información sobre la energía que tiene esa persona, sino también nos va dejar entrever cuáles son los mayores retos y escollos pero también sus fortalezas. Pero cuidado, no para que se entregue a la supuesta mala suerte que pudo tener en el momento de nacer, como sostiene la astrología determinista, sino, para tener la certeza de que, detrás de esa dificultad, y luego de aceptarlo y trabajarlo, está la mayor evolución que puede hacer en su vida.